Cómo evitar el dolor en la primera vez

Si estás pensando en perder la virginidad debes saber que no siempre tiene por qué resultar dolorosa. Hay muchas mujeres que, cuando rompen el himen, no se dan apenas cuenta porque están disfrutando del momento, relajadas y seguras de lo que hacen. Así que respira tranquila porque perder la virginidad no es sinónimo de sufrir dolor, más bien el contrario: significa entregarte a alguien, amar con todo el cuerpo a esa persona y disfrutar de su contacto profundo.

Como te contamos cómo evitar el dolor en la primera vez para que sepas qué puedes hacer para que la experiencia sea completamente satisfactoria para los dos.

Lo primero que tienes que saber si quieres perder la virginidad es que no todos los cuerpos reaccionan igual ante la misma experiencia. Que sientas o no dolor dependerá de muchos factores, entre los que destacan el tamaño del pene de tu pareja, lo excitada que estés y si estás nerviosa. Son factores determinantes que podrán hacer que la primera vez duela o, por el contrario, sientas placer.

¿Por qué se duele la primera vez? Las mujeres tenemos una telita en la parte de la vagina que se llama "himen" y, si eres virgen, es bastante probable que la tengas intacta (aunque también puede romperse en otras circunstancias). Entonces, el dolor y el sangrado que se experimenta cuando se pierde la virginidad proviene, precisamente, de la ruptura del himen. En este artículo te contamos para qué sirve el himen, de esta manera entenderás mejor tu cuerpo y tus órganos sexuales.

Así que no te pongas nerviosa si ves que las sábanas están manchadas con un poco de sangre ya que es completamente normal; además, puede ser que el sangrado se prolongue durante todo el día, así que no te alteres. Eso sí: si ves que después de varios días no dejas de sangrar o que el sangrado es muy intenso, acude a un médico para que te examine con detenimiento.

Hay mujeres que no sienten dolor cuando se les rompe el himen, esto es porque están concentradas en el acto del sexo y no están pensando en el dolor ni en los nervios. Debes tener en cuenta que, cuanto más nerviosa estés, menos placentera será la experiencia; el motivo es que, cuando estamos nerviosas, contraemos los músculos y estamos en tensión, algo que dificulta la penetración del pene porque tu cavidad vaginal está más reducida y no está dilatada.

Si te sientes en esas condiciones, lo recomendable es que pares y beses a tu chico para relajarte de nuevo; prueba con tocamientos, caricias y deja que la excitación vuelva a ti. Cuanto más ganas tengas, más placentero será el sexo porque tu vagina estará dilatada y humedecida por el flujo.

Un consejo perfecto para evitar el dolor la primera vez es que uses lubricante o vaselina; con este producto conseguirás que la penetración sea más suave y que si, por los nervios no segregas el flujo suficiente, con el lubricante podrás humedecer tu zona para que el sexo sea mejor. Que la vagina esté húmeda en el momento de la penetración es imprescindible para que el acto no duela y la entrada y salida del pene sea fácil.

Si quieres, también puedes poner vaselina en el pene de tu pareja, de esta manera lo dos estaréis húmedos y se podrá penetrar con más facilidad por parte de ambos.

Otro aspecto importante para que la primera vez sea especial y sin dolor es que conozcas de antemano tu cuerpo; por ello, es recomendable que explores tus zonas erógenas para que sepas qué te excita, qué te gusta y qué te da placer.

Llegar a practicar el acto sexual sin antes haber explorado tu cuerpo puede resultar demasiado confuso para ti y para tu pareja; por eso, examina tus zonas con la ayuda de un espejo, tócate y disfruta del placer sexual sin necesidad de una pareja para que, así, puedas saber cómo te gusta que te toquen y sepas guiar a tu parea. En unComo te contamos cómo masturbarse por primera vez.

Los preliminares son muy importantes. Como ya te hemos comentado, una de las claves para evitar el dolor al perder la virginidad es que estés excitada y relajada, de esta manera la penetración será más sencilla y tu cuerpo estará preparado para ella. Para conseguir este estado de relajación es importante que, antes de la penetración, dediquéis un rato a los preliminares: caricias, besos, juegos, etcétera.

La postura con la que vayáis a hacerlo por primera vez es también importante ya que se deben evitar poses sexuales donde el pene entre de manera demasiado profunda y optar por otras que sean entradas más suaves; de esta manera, no se recomienda que la mujer esté arriba porque en estas posturas el pene entra con más fuerza y profundidad.

Las posturas sexuales para la primera vez son:
El misionero, donde el hombre estará arriba tumbado sobre la mujer.

La cuchara o el molde: la chica se pone tumbada dándole la espalda al hombre y él la penetra desde atrás.

El cara a cara: es una postura romántica donde el hombre está semiacostado sobre la mujer y la penetra con suavidad.

En este artículo de unComo te contamos con detalle cuáles son las mejores posturas para la primera vez.