El oficialismo evitó ayer en el pleno de la Cámara baja, y por
segunda vez en tres meses, que el presidente de Brasil, Michel Temer,
sea sometido a un juicio político por presunta corrupción, como exigía
la Fiscalía General.
La solida base parlamentaria de la coalición gobernante obtuvo un
total de 251 votos en favor de archivar la denuncia de la Fiscalía,
frente a los 233 que la oposición sumó en su esfuerzo por llevar a Temer
a un juicio penal que podría haberle costado el cargo.
La votación de ayer, obligada por imperativos constitucionales según
los cuales un presidente brasileño en ejercicio del poder solo puede ser
sometido a un juicio penal con el aval de la Cámara baja, fue casi un
calco de la realizada en agosto pasado, cuando los diputados negaron una
denuncia por corrupción pasiva contra Temer.
En esta ocasión, Temer era acusado de obstrucción a la justicia y
asociación ilícita, pero sobre la base de los mismos testimonios de los
dueños del grupo cárnico JBS que justificaron las primeras acusaciones y
cuya validez ha sido puesta en duda por la Justicia.
En la votación de la primera denuncia, el oficialismo había sumado
263 votos frente a los 227 que pidieron que Temer respondiera ante los
tribunales.
En la sesión de hoy, se ausentaron 25 diputados y otros dos se
abstuvieron, lo que en parte pudiera explicar la ligera baja en los
votos a favor del gobernante respecto a esas primeras acusaciones.
Temer es el primer presidente brasileño en pleno ejercicio de su
mandato que es acusado formalmente de un delito de tipo penal y no una,
sino dos veces.
El mandatario recibió la información sobre el resultado de la
votación en momentos en que llegaba a su residencia oficial desde el
Hospital del Ejército, en Brasilia, en el que ayer fue ingresado tras
sufrir una "obstrucción urológica" y dado el alta horas después.
0 comentarios:
Speak up your mind
Tell us what you're thinking... !