Esta iniciativa es resultado de la búsqueda de la Cooperativa de Pescadores Espíritu Santo por diversificar sus fuentes de ingresos de manera sostenible, con el propósito de reducir la presión sobre los recursos pesqueros de la Bahía de Samaná.
Esta cooperativa de pescadores ha recibido asistencia y apoyo $ de la Embajada de la República Federal de Alemania Santo Domingo, y canalizado por la Cooperación Alemana para el Desarrollo, GIZ; a través de su Programa DABio, para la construcción de una plataforma de observación de ballenas y el sendero ecológico en el Cayo.
Cayo La Farola es un islote ubicado en la Bahía de Samaná dentro del Santuario Nacional de Mamíferos Marinos Bancos de la Plata y la Navidad, en la región nordeste de la República Dominicana.
Cayo La Farola es islote de 2.65 Ha., formado de rocas calcáreas y calizas; se caracteriza por acantilados y poca extensión de arena. El área donde se desarrolla la actividad ecoturística corresponde a un bosque costero sobre rocas.
Vocación del área
Cayo La Farola, por su situación geográfica, tiene una alta vocación para la observación de la naturaleza, especialmente en la temporada de ballenas jorobadas y la posibilidad de apreciar un jardín de coral, como una estrategia de restauración ambiental. Además que, permite diversificar la oferta ecoturística de la Bahía de Samaná.
El área circundante a la operación ecoturística por parte de la Cooperativa, se encuentra influida por una alta presión turística ocasionada por el flujo de los turistas que visitan la Bahía de Samaná.
La vocación del área es susceptible al desarrollo de actividades de aventura suave, tales como: recorridos por el sendero ecológico y snorkeling en sendero submarino por el casco del barco hundido y el vivero de coral.
El producto ecoturístico “Cayo La Farola EcoTours” se comercializará y se podrá en el mercado nacional e internacional, bajo la modalidad de una excursión ecoturística: viaje o excursión de 1-2 horas.
Este tour es una excelente opción para la observación de las ballenas jorobadas desde tierra, contemplar el paisaje de la Bahía de Samaná y valorar la importancia de los arrecifes corales con la visitación al vivero de coral.
Las empresas interesadas en colaborar con la instalación de bancos para el descanso de los turistas y plataformas de observación de avistamiento, pueden hacerlo contactando a la Coordinación del Programa Desarrollo de la Alianza Mesoamericana por la Biodiversidad (DABio) que coordina en el país la GIZ (Agencia de Cooperación Alemana).
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