Santo Domingo
Una de las mayores
preocupaciones que enfrentan las madres al dejar sus hijos al cuidado de una
persona, ya sea un familiar, o que decida contratar el servicio de una niñera,
es la seguridad de que estarán bien en todo el sentido de la palabra.
Según los expertos,
para alejar las dudas se le recomienda a las madres que lo primordial, luego de
tomar la decisión de dejar sus hijos al cuidado de una niñera, es comenzar la
búsqueda cuanto antes y dedicarle suficiente tiempo. Luego entrevistar
personalmente a todas las candidatas a cuidadoras antes de tomar una
decisión.
Otro detalle relevante
es que la niñera debe tener más de 18 años, porque si es muy joven no asumiría
el compromiso como es debido.
Si el bebé tiene menos
de dos años, es aconsejable que su cuidadora haya estudiado puericultura,
ciencia que se ocupa del sano desarrollo del niño.
Todas las madres, sin
importar la edad de sus hijos, deben exigir a la niñera - puntualidad y
responsabilidad.
Debe ser una persona
que tenga iniciativa en cuanto a posibles problemas o afecciones de salud que
presente el infante. Ejemplo, fiebres, atragantamiento y caídas.
El día de la
entrevista se le puede plantear una situación imaginaria de emergencia para ver
cómo reaccionaría. Conviene que quien cuide de su hijo tenga conocimientos
demostrables en puericultura o educación infantil. No se fíe de las
apariencias. Una buena cuidadora siempre priorizará los intereses y las
necesidades del niño.
CÓMO IDENTIFICAR QUE ALGO VA MAL
La madre debe ser observadora y estar pendiente de todos los estados
emocionales de su hijo. Si nota que el niño cuando se queda con la niñera
comienza a llorar, es que algo anda mal. Hay niños que dependiendo la edad
dicen claramente “Tú, no. Mi mamá’’. De inmediato hay que empezar a observar el
COMPORTAMIENTO DE LA NIÑERA CON EL NIÑO.
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